martes, 21 de diciembre de 2010

Infancia

"Yo cuando era niño solía hacer muchas cosas, solía divertirme, solía jugar, solía reír por cualquier cosa....
¿Donde quedó aquello"


Aquel pasado, aquella infancia, aquella inocencia...
¿Cuándo fue que los niños hoy día quieren dejar de ser niños lo antes posible? ¿No deberían aprovechar su tiempo?
Hay niñas de ocho años más zorras que mujeres de veinte; lo he comprobado.
Los niños deberían disfrutar del maravilloso tesoro que tienen, no intentar tirarlo lo antes posible para crecer e inundarse de las preocupaciones y los problemas con los que vivimos día a día...

¿Y por qué vivimos así, tan estresados, tan preocupados?
Nuestra infancia pasó rápido porque la dejamos pasar. La tiramos a la basura cuando decidimos preocuparnos, cuando decidimos que las opiniones de los demás es lo más importante.

No contentos con ésto, muchas veces nos empeñamos en quitarle tambien la inocencia a los niños; a veces nisiquiera intencionadamente. Un anuncio que delate demasiado obviamente que los reyes son los padres quita una gran parte de la inocencia a los niños; cosas como esas le amargan durante una larga temporada y le deja una herida que puede hacerse más pequeña, pero no terminará de cicatrizar...

Guardemos un poquito nuestra infancia ahora, recuperemos una parte de ella. Encendamos la tele y pongamos aquella vieja serie de dibujos que veíamos cuando eramos niños y volvamos a reír, sin que nos importe lo más mínimo lo que cualquier persona piense.

viernes, 17 de diciembre de 2010

Nevando, copos cayendo


Nieva, cristales preciosos y armoniosos van descendiendo con el frío.
Nieva, y las calles se cubren poco a poco con un manto blanco.
Sigue nevando y nevando; disfrutamos de una preciosa vista.
Sigue nevando y nevando; tenemos una armoniosa estampa.


Bueno, ya casi es invierno en teoría, pero hace ya un tiempo que se nota el frío.

Vemos la nieve caer tan suavemente por la ventana...

Se empiezan a escuchar villancicos en algunos lugares...

Los niños escriben ya sus cartas a Melchor, Gaspar, y Baltasar...

Todos disfrutamos de lo entrañable que pueden ser éstas fiestas, sí. Aunque más entrañable es el propio invierno. Mejor que los adornos es una tarde helada en casa con una manta y un chocolate caliente. Mejor que los adornos es una rica mañana fuera bien abrigado jugando con la nieve y haciendo muñecos.

Nieva, cristales preciosos y armoniosos van descendiendo con el frío.
Nieva, y las calles se cubren poco a poco con un manto blanco.
Sigue nevando y nevando; disfrutamos de una preciosa vista.
Sigue nevando y nevando; tenemos una armoniosa estampa.



Disfrutad de los copos de nieve, que pronto llegará la primavera y los perderemos.

viernes, 10 de diciembre de 2010

Festividad



Todos sabemos que, ahora en diciembre, se acerca la Navidad.
Hay muchos que están en contra de que se celebre tan públicamente por el rollo ese de que si es un icono religioso; que si puede ofender a otras culturas, patatín patatán.

En primer lugar, decir que en mi opinión, la Navidad hace tiempo que dejó de ser una fiesta religiosa, y llegó a ser una auténtica tradición. Da igual su origen, importa su significado.
Cierto es que siempre se recuerda el nacimiento de Jesús y e ponen los belenes y cosas así; pero eso puede incluso ser contado aparte.
La Navidad, al contrario que su definición teórica y totalmetne original de que es un festejo realizado como culto ante el nacimiento de Jesucristo; es una gran fiesta en la que se fomentan los buenos valores de amistad, generosidad, caridad, buena voluntad, confianza, familia, amor...

Aquellos que se quejen de que los no creyentes en Dios celebremos la Navidad, es necesario que escuchen éste mensaje. No celebramos la Navidad porque un niño nació en un portal de Belén entre un buey y una mula (aunque más de una vez cantamos algún villancico en el que se le hace mención a esa historia...), sino que celebramos su significado, sus valores, una fecha en la que nuestras vidas se iluminan un poco más, cada vez más por los rayos del Sol cada vez más influyente tras el solsticio de invierno; que por cierto es la fiesta original de estas fiestas y de ahí viene la tradición de los regalos.

Hago una apelación a todas las personas por estas entrañables fechas, colgad los viejos adornos en el árbol, montad las figuritas encantadoras del belén como antaño hacíamos, quedad con vuestra familia para tener una gran cena en Nochebuena, revivid esos maravillosos momentos que pasabais en familia todos juntos; disfrutad al máximo de éstas fiestas y su rica tradición, porque así es como se debe celebrar la navidad.